Orense 21-12-2015 Pautas para el grupo de trabajo, Arcángel Miguel
Canalizado por Mª de los ángeles V.P:
Mis queridísimos hermanos. Hoy me dirijo a todos ustedes y a todo este hermoso equipo de trabajo en señal de agradecimiento. Están dirigidos por las fuerzas sanadoras y espirituales del Cosmos. Nosotros solo los asistimos en momentos necesarios cuando ustedes no dan puesto ése Amor suficiente que emana de lo divino y está encerrado dentro de sus urnas, y éstas están cerradas herméticamente.
Ya es el momento de que todos ustedes las abran para conocer el divino placer de encontrarse con Dios y hacerle un huequecito, para que Él se sienta más cómodo dentro de nosotros mismos. ¿No sabéis que Él está deseando abriros los brazos y daros todo su Amor? y éste será muy beneficioso para todas las almas que estén dispuestas a ser sus mensajeros en éste tránsito de elevación.
Quisiera, seres queridos, daros las gracias por vuestra labor de ayuda y daros las respuestas a todas las incógnitas que tengáis. No precipitaros si éste es el camino correcto. Seguid en vuestro deseo de ayuda y servicio a todos los dolientes. No desfallezcáis. Éste es un trabajo ejemplar que os ayudará a vosotros a crecer en él.
Siento que no podáis escuchar mi voz, porque me expreso para todos y siento en mi alma una inmensa tristeza por aquellos que se alejan cada día más de mis intenciones. Deseo para ellos el regreso a las corrientes del bien, pues les infundirá ánimo para que la Luz y la esperanza los guíen siempre.
¡Oh mis chiquitines! ¡Qué pena me dais cuando os alejáis…! y qué alegría inmensa me produce cuando regresáis a la felicidad de Dios. Porque Su energía es tan perfecta que cuando la captáis sois felices y nada os costará. Sólo desead sintonizar con las fuerzas divinas que están derramándose para todo ser que quiera servirse de ellas. Éstas son tan especiales que solo con sentir su presencia cura toda dolencia. Y esto es así.
No perdáis el rumbo que se os da, porque si lo intentáis el Padre que es tan generoso con todos sus hijos os aplicará el don de la sanación a todos aquellos que pronuncien las palabras mágicas: -Yo trabajo en el nombre de Dios Padre y Él me ha concedido su poder de la sanación.
Siempre que actuéis en Su nombre veréis todos los éxitos. Sólo tenéis que tener fe y veréis cuanto bien hacéis a la Humanidad.
Disponeros a trabajar en Su obra; no penséis que esto que yo os digo es algo que no tiene fundamento, no es así. El que quiera comprobarlo podrá ver la claridad mental que acude a su mente. Sólo tenéis que disponeros y nadie estará sólo, porque los seres de Luz os protegerán siempre que deseéis hacer el bien común.
Si sois pacientes en vuestros trabajos de ayuda a ésta Humanidad os veréis desbordados de trabajo, porque cada día tendréis más y más. Seréis tan felices que no veréis el final a vuestra propia felicidad, y os sentiréis muy halagados por vuestra gran obra.
¡Qué hermosura servir al necesitado…! y sobre todo aquel que padece tanto y está entre las tinieblas y no ve nada de Luz. Vosotros sois como luceros en su camino errante que a veces no tiene fin.
¡Ay mis pequeños benjamines! no dejéis éste trabajo nunca sin finalizar, porque ellos también son hijos de Dios y Él los ama tanto como a vosotros que camináis derechos a la Luz.
Pero bien os digo: -si servís a la Luz, no deberéis temer a nada-, sólo con la Luz en vuestra mente os ayudará en todo momento del trabajo que realizaréis.
Siento no poder daros más instrucciones en el día de hoy. Deseo haberos halagado después de vuestros trabajos. Servid a la Luz siempre.
Yo, el que más os ama. El amado Arcángel Miguel.
