Orense, 18-9-2015 Mensaje del Amado Maestro Jesús
Canalizado por Mª de los ángeles V.P:
¡Oh amados míos! Yo estoy aquí entre vosotros. No desesperéis que lo veo todo y siento cada latido de vuestro corazón.
Sinceros sois cuando pedís ayuda sí, y la tendréis; eso sí, tendréis que estar seguros de que confiáis en ella y en mi promesa.
Yo os amo desde mi corazón y vosotros, ¿sabéis amar a vuestros enemigos como yo os amo día a día? Qué fácil es amar al que está en armonía contigo... ¿Y con el que comete una falta, dónde está ese Amor sincero que me prometes día a día?
Los cambios venideros son esos a los que me refiero que hay que cambiar la manera de actuar y ver en armonía todo este planeta, con sus circunstancias. Pero yo te pido ayuda a ti para que con tú vibración cambies todo este sistema planetario. Con tu ayuda cambia, ¡cómo no…!
Yo pido siempre ayuda a mis hermanos, porque son ellos los que hacen que el sistema de su ser se oriente con la energía del cielo. Yo estoy en los corazones que saben amar y dejar a tras las malas épocas; esas que sirvieron para hacer crecer un alma, y ese alma perdonó las transgresiones que recibió. Pero también en ella se ve el futuro con alegría y aliento para ver la paz.
No devolváis nunca maldad, pues debéis ser seres limpios de conciencia. Si trabajáis en unión con mi equipo, estaréis preparando vuestro traslado a la nueva dimensión, donde os acogeré a todos con el mismo Amor que vosotros habéis medido.
Yo forjaré un nuevo método para las personas que deseen estar en vibración con la Tierra cambiante. Tratad de vivir el presente en paz y olvidar el pasado que no existe. Las circunstancias son las que tienen que ser y fueron en su día.
¡Ay como sois que no sentís de verdad mí afecto directo…! ¡Cómo os traiciona vuestra mente…! A mí me preocupa el que no creas. Si yo estoy a tú lado y en tu interno ser, ahí está mi Padre que me dice: -Espérala que está congestionada con tanto revés. Pero no es eso solo, pues latiendo está su corazón y este sufre con tanto abandono y lo quebrantáis.
No dudéis. Yo hablo por cualquier ser que los ángeles Guías ponen a mi disposición. Solo os pido que en este final de los tiempos de la oscuridad, pongáis remedio a vuestra alma y no juzguéis a nadie para salir mejor de esta etapa que trae un final hermoso para todos los seres. No lo penséis dos veces. Lo que yo digo está en camino de cumplirse.
Seres míos divinos que estáis llenos de Amor, sí, llenos de Amor todos. Cuando Dios os creó os dio su Luz y Sabiduría perfecta y está dentro de vosotros y de ahí no se irá jamás; solo cuando la rescatéis de vuestro corazón y entendáis que Dios Padre y Madre habita en vosotros.
Sed luceros y escuchad la palabra dada que os hará bien y tomaréis de Su mano perfecta todo lo que necesitaréis.
Benditos, benditos, benditos míos. Estoy a vuestro servicio y os amo tanto que más no podría amaros. Sois míos porque así lo dispuso el Padre; y si lo sois os quiero libres de ataduras que os hacen tanto daño. Soltad las amarras para poder navegar mejor y estar en conexión con el alma; y si esta está en perfecta armonía, sentirás lo que digo yo.
Creo necesario decirte que si me sientes en tu corazón es porque piensas que estoy ahí contigo y gozas de una gran libertad de Amor, y expresas a tus amigos y conocidos que siempre estás respaldada de este ser que cuida de tu ser, pero también es cierto que puedes renegar de mí.
Yo solo necesito Amor para fundir corazones y abrasarlos con mi inmenso Amor de Hermano Mayor. Cuando ese Amor se funde entre los dos seres que por circunstancias están alejados de mí, yo trato de poner los medios para que las circunstancias sean otras más entendibles.
Deseo transmitir unión e inteligencia entre los hermanos y que se cuiden los unos a los otros. ¿Por qué pensáis que ocurren tantos desajustes en este planeta? pues es para ver la capacidad de actuar de otros seres y como tratan de ser solidarios. ¿Tú lo eres, hermano amado? ¿Cumples con tu contrato que has traído a este planeta? ¿Estás seguro que no pones resistencia a lo que te han mandado que hagas con tus dones?
Mírate bien, pero no por fuera, sino en tu interior. Medita y observa cuanto tiempo hace que estás en este plano físico. ¿Cuántas vidas has vivido en este plano? ¿Eres merecedor de todo lo que tienes? ¿Cuántas cosas has pasado sin darte cuenta de que yo estaba a tu lado observándote?
No cierres esa puerta tan importante que es la del corazón, pues son momentos de dicha y reflexión constante. Lee en tu corazón esas mágicas palabras que están escritas a fuego eterno. No te consumas en ese fuego, sino, crece en él. Y bendito tú, hermano querido que sabes que yo soy ese que te alumbra el camino diario y te llena de fe para que vivas en armonía y felicidad, y que puedas estrechar las manos de esos seres que constantemente tienes en tu mente. No suelo ser tan directo.
A mis hermanos los ayudo a que encuentren la paz, esa que no encuentran en sus almas atormentadas. Yo los guio y trato de enseñarles el camino hacia esa puerta de Luz y de Amor; y al final, cuando yo miro, veo con claridad que todo fue un error de cálculo. Eso es así mis amados seres.
Estad alerta que la Luz está toda en vosotros; solo que estáis tan ensimismados en otras cosas que no la veis ni sentís. La Luz es una Luz brillante que os acomoda la vida y os llena de dicha. Así es cuando yo hablo en nombre de mi Padre. El esplendoroso rayo se sumerge dentro de los seres humanos porque Él y yo así lo hemos decidido. Eso tenedlo presente en vuestras almas de Amor.
Si vivís pendientes de la armonía, esta vivirá en vosotros. Solo en vosotros habrá harmonía en vuestro ser, y sabrosa será la abundancia, a pesar de lo que otros piensen. Yo solo os digo: -Tened a mano la paz y yo viviré con vosotros, esto os digo.
Hasta siempre, benditos, benditos, benditos míos. Os amo en todo momento.
Luz y Amor y Progreso.
Jesús
Pd: Tenéis una gran oportunidad de resolver viejas heridas, no la desperdiciéis. Es la oportunidad que os da el Cosmos, no la desechéis. Como esta no habrá otra en miles y miles de años.
Todos sabéis que la Ley de Causa y Efecto está ahí. Perdonadlo todo. Es un bien para vuestra alma.
