Orense, 11-3-2016 Mensaje de un Guía para el grupo
Canalizado por alguien del grupo:
Hermanos, no os canséis de pedir, no os canséis de pedir y luchad en esa lucha por lo que se corresponde por justicia. En todos sitios y en todos los tiempos, desde que el tiempo es tiempo, desde el principio de los tiempos, hubo que luchar siempre por lo que uno quería. Hay que luchar siempre con la palabra Divina por delante, pidiendo a Dios Ayuda en esa lucha. Pero como dice la canción “como las alas al viento” hay que luchar por lo que uno cree que le pertenece, que es de uno.
¡Hay que luchar, hay que luchar hermanos! tanto espiritual como materialmente. Vosotros, hermanos que estáis al otro lado, tenéis que luchar con la palabra, pidiendo ayuda, pero siempre. La lucha quiere decir que hay que tener constancia. No se puede quedar quieto uno. Siempre que se pidan cosas que sean de justicia, se os van a dar. Pero eso… en cualquier planeta que existe la vida, que existe el Amor, que existe el trabajo, que existe en los estudios.
En el trabajo, en todas partes, en todas las épocas de la vida hermanos, hay que luchar, porque si abandonáis no se consiguen las cosas. La lucha es esa, pero una lucha pacífica y siempre con Amor.
La lucha con Amor, hermanos, esa es la lucha. Esa lucha la quiere Dios, porque uno debe conseguir aquello que es de justicia y es de uno. No hay que dejar que nadie te lo arrebate. Las cosas que vosotros trabajáis con Amor, os pertenecen hermanos, os pertenecen, son vuestras. Eso es vuestro cuando se consigue con paz, sin quitarle nada a nadie.
Esa lucha sí os ayudarán a conseguirla hermanos, esa lucha sí. Porque, cuando hacéis esa lucha, cuando hacéis esos proyectos, cuando peleáis y ponéis ese empeño en esa lucha, Dios os quiere ver ahí, animosos. Os quiere ver implicados haciendo esas cosas que os gustan hacer. Cuando vais a sitios que las cosas se os ponen mal pero decís: no, yo voy ahí porque tengo que luchar por esto, porque tengo que ayudar a mi hermano, porque tengo que ayudar a esa persona que me necesita; porque tengo que ayudar a mi hijo, a mi hija, a un hermano, a un primo o a una persona que no conocéis, pero que os pidió ayuda, esa es la lucha hermanos. Lucháis por lo que vosotros creéis que es justo. Luchad por eso hermanos.
Y vosotros, los que estáis al otro lado (los desencarnados), luchad. Cuando esta hermana os dice: -coged esas cintas de colores-, es porque esas cintas son para daros energía y subir por ellas, cogiéndoos a ellas. Porque estáis luchando por pasar al otro lado. Esa es una lucha, pero una lucha por algo que os pertenece, que vosotros trabajáis; que tenéis que hacerla porque nadie os va a hacer pasar si no lo merecéis. Tenéis que trabajarlo vosotros y desearla. Esa es la lucha.
Por eso, porque en esa lucha está implicado el trabajo, lo que es de uno. Y se consigue, haciendo lo que uno quiere, trabajando por lo que uno quiere. Porque en el trabajo, cuando vais a trabajar tenéis que luchar por vuestro trabajo; sin quitarle nada a nadie ni perjudicarlo. Pero si os quedáis estancados… entonces nada se os va a dar.
Dice un refrán: -A Dios rogando y con el mazo dando. No tiene nada que ver una cosa con la otra. Es un dicho muy cierto. No hermanos, nadie os va a regalar nada, nada. Bueno, no sé, a muchas personas le está más fácil que a otras, pero al fin y al cabo si es honradamente y lícito, tenéis que hacerlo vosotros, hermanos. Pero lo mismo es aquí que allá. Eso, no penséis que nadie os coja y, ¡hala! Os voy a poner allí porque… Hombre, no es así. Aquí en la Tierra tenéis que estudiar, tenéis que prepararos haciendo las cosas, pero, nadie os regala nada. Eso lo sabéis bien.
Bueno, gracias y, perdonar porque me he dejado llevar por la emoción y por esa canción que habla de luchar (como las alas al viento), pero esa lucha que es bella y hermosa hermanos, es bella. Porque es la ilusión, porque si no se tiene ilusión tampoco se tienen ganas de luchar y os quedáis estancados. Eso es así.
Bueno, que tengáis una semana preciosa: de Amor, de estar con vuestras familias, y que todas las cosas os salgan bien; pero siempre luchando, trabajando en aquello que creéis y que queréis conseguir, porque todo hay que trabajarlo. Cualquier cosa que sea. A veces la vida te pone esa zancadilla, ¡claro! Pero esa piedra en el camino también hay que saber esquivarla, dar ese pequeñito rodeo y pasarla. O ese pequeño riachuelo que también está ahí para que no todo sean piedras, pero ese pequeñito riachuelo que cuando uno pasa por un camino lo ve dice: -que bonito-, y levanta uno la pierna y lo pasa.
¿Pero de qué hablamos y como se llama esa energía? Esa energía que se genera para poder pasarlo y esquivarlo, eso es lo que realmente es la vida: -EL ESFUERZO-, y hay que ir llevándolo como cada uno pueda.
Bueno, muchísimas gracias. Que Dios os bendiga y que obtengáis todo aquello que deseáis, que ya no es poco.
