Orense, 17-2-2017 Comunicado de un ser, para analizar
Canalizado por alguien del grupo:
Buenas hermanos, a todo el mundo. No hagáis nada de aquello que no queréis para vosotros hermanos. Ante la vida y ante Dios somos responsables de todo lo que hacemos. Pero la vida, por decirlo así, te devuelve aquello que haces en un momento u otro, hermanos.
No faltes al respeto, no ofendas, no rebajes; no juzgues porque te juzgarán, te faltarán al respeto, te harán daño en aquello que a ti más te duela. Te devolverán más de lo que tú has hecho, eso es así.
No penséis que porque no se ve, porque no le esté pasando nada, porque no reciba de rebote aquello de lo que ha hecho, en algún momento de la vida le será pasada la factura hermanos, ¡valla sino...!
Proteged y respetad a vuestros mayores, aunque ellos no os hayan respetado ni os hayan ayudado, o que no hayan ejercido como padre o madre. ¡Cuidadito con eso hermanos…! Se paga doblemente. Porque eso es un derecho adquirido aunque no se merezca, por la persona que trae al mundo, que cría, que cuida, que pare a un hijo, hermanos.
Respetad siempre a un padre y a una madre. Siempre hay que tenerles respeto, aunque no lo merezcan, porque hay padres que no saben serlo, hermanos. Pero aun así, a esos padres hay que respetarlos, sino, mal se anda. Se carece de valores, no se respeta nada. No hay Amor hermanos, ¡no hay Amor! No hay respeto y del respeto sale todo: La tolerancia, el Amor, la sonrisa, la paciencia...
Todo en el Cosmos te es devuelto hermanos. Todo te es devuelto. Y así es la Ley Divina. Esa ley que es, será y perdurará todas las vidas del ser humano en tanto está en la Tierra. Todas. Dependiendo de la época. Dependiendo de las costumbres, las leyes, eso va a perdurar hermanos, pues de una manera u otra eso pasará factura. Eso hay que respetarlo.
Bendito aquel que lo hace, y más si lo hace con cariño; cuanto más si lo hace con cariño hermanos, porque unas más que otras personas mayores se hacen pesadas por la edad, porque ya no tienen paciencia; porque las vivencias que han tenido les van gastando la paciencia y los sentidos llegando hasta olvidarse la mayoría de ellos y como fue su vida. Y si eso no lo respetamos, mal andamos.
Dios os bendiga a todos. Os está hablando un ser que no ha sabido comportarse cuando tuvo que haberlo hecho, y se le ha devuelto esa enseñanza que la ha aceptado, pero ha tenido que pagar por ello hermanos.
Soy un hermano que le ha sido concedido el don de poder manifestarse hoy y decir lo que él no hizo bien, para que se escuche y cada uno lo coja como vea conveniente, hermanos.
Nunca está de más escucharlo, nunca. No será vuestro caso, pero si aún estáis ahí en ese momento de que igual lo hacéis, rectificar, y el que no, las palabras quedan ahí. Las buenas obras quedan en el aire. Bendicen a la Tierra según las buenas palabras y las buenas obras, o hacen daño y empobrecen el ambiente generando malas energías.
Las buenas obras, las buenas palabras que se dicen de corazón, son flores, es Luz que enriquece el planeta. De esas bellas palabras nacen flores y Luz. Son como las estrellas que se esparcen por el planeta y alumbran a todo aquel que quiera coger esa Luz. Y el que no la quiere coger en este momento, en algún momento la cogerá. Lo que no va a coger y si lo coge, son las malas obras. Esas no ayudan a nadie hermanos, solo hacen entorpecer al ser, a la armonía de él y de todos los que le rodean. Y las buenas palabras, los hechos, los ejemplos, siempre dan fruto hermanos. Unos frutos hermosos que enriquecen el planeta y las familias, los amigos; y los que no son amigos, siempre le quedará algo.
Siempre se aprende hermanos. ¿De qué se aprende? Se aprende del Amor, de los ejemplos buenos. Porque lo que se aprende de las malas cosas no conviene, no enseña, no enriquece.
Gracias, gracias por ser como sois, porque pedís por el planeta, por vuestro mundo en el aquí y en el ahora, esparciendo Amor, sonrisas y buenos hechos, costumbres sanas y buenas…
Gracias hermanos
