HISTORIA DE LA HUMANIDAD

 Lanzarote, 1-5-2013 Mensaje de los delfines

Recibido por Lucia Mei:
Hola querida hermana, hoy queremos seguir hablando de un tema que es de interés general y está relacionado con la formación del Planeta Tierra y como éste comenzó a poblarse.
En un tiempo muy lejano que no podemos clasificar, sino con eones y eones del tiempo vuestro,
hubo una gran explosión cataclismica en una galaxia lejana. Esta tumultuosa explosión hizo que se produjera una cantidad enorme de polvo estelar; y una gran masa homogénea de material explosivo se trasladó a una velocidad muy elevada hasta llegar a donde ahora está situado vuestro sistema solar.

Una vez llegada a éste punto, esta inmensa masa empezó a fraccionarse en partes que originaron los planetas de vuestro sistema solar, los cuales empezaron a describir giros elípticos alrededor de una estrella cercana: vuestro sol. De todas las partes que se separaron de esa enorme masa, la Tierra fue una de las más afortunadas, para poder acoger un tipo de desarrollo del cual vosotros sois testigos. Las demás partes formaron el resto de los planetas de vuestro sistema y se alinearon también alrededor de vuestro Sol, que, claramente es una estrella; pero pequeñísima comparada con los millones de estrellas que existen en el Cosmos.
Los astros forman parte de un desarrollo muy antiguo y anterior a los planetas, porque están hechos de pura luz y atraen a su alrededor la formación de planetas. Hay continuamente sistemas solares en formación, porque la creación no tiene fin y es una continua expansión. Ahora volvemos a vuestro precioso planeta azul.
La Tierra se formó cuando parte de éste material explosivo, desplazándose por el espacio, atravesó un punto en la galaxia que le permitió posicionarse donde se encuentra ahora. Se posicionó cerca de vuestro astro, que la atrajo hasta un punto estratégico: -ni muy lejos ni muy cerca-, para permitir en un futuro desarrollar vida. El Sol, como estrella de luz que es, es el padre del planeta; y la Tierra es la madre que engendra la luz de su astro para permitir el desarrollo de la vida en su vientre; y todo, claro, según el gran plan de la Creación.
Nada se crea así mismo, todo procede del punto de Luz del cual hablamos tiempo atrás. Todo está creado en origen por un acto de Amor infinito que es anterior a la misma Luz. Estos son conceptos abstractos para vuestra mente, pero es necesario enunciarlos, y cada uno puede conceptualizarlo en su mente. Lo más importante es remarcar que la Creación no es el fruto de la casualidad, sino que es el resultado de una inteligencia infinita que lo implementa todo atreves de unas Leyes que funcionan perfectamente. Estas Leyes llegan a vosotros como impulsos para crear en vuestro mundo, como reflejos de esta infinita inteligencia que aquí en la materia vuestro cerebro recibe, moldeándola y adaptándola hasta modificar los principios; reduciéndola de tal manera aun pequeño rayo de Luz.
Volviendo a la Tierra: en el origen y en un principio, esta era un cuerpo principalmente gaseoso donde se filtraba poco la luz del Sol y la masa de gases que la formaban era tan densa… Estaba compuesta sobre todo de nitrógeno y varios gases ácidos; los cuales dieron origen a un elemento mucho más ambicioso, que a la postre sería la base de las primeras formas de vidas: -El ácido ribonucleico.
Sucesivamente el ácido ribonucleico desencadeno una serie de reacciones de las cuales se desprendieron filamentos de ADN; y de éste derivaron unas partículas muy minutas, pero potencialmente poderosas para desarrollar el tipo de vida en que derivo. El agua que se formó desde la dispersión de los gases iniciales. Estos fueron tan elevados que pronto se cubrió el planeta, y en principio fue un planeta de agua, principalmente. En éste ambiente acuático se formaron las amebas y seguidamente con la evolución se desarrollaron seres acuáticos bien definidos.
Después de millones de años evaporando el agua, en las partes más altas del globo permitió que algunas formas de vida se trasladaran desde el agua a tierra. En principio estos animales conservaron parte de su aspecto anterior, después con una lenta y gradual evolución abandonaron totalmente el agua para transformarse en las grandes criaturas depredadoras que conocéis como dinosaurios. Estos animales adquirieron tallas gigantescas y claramente fueron los dueños del planeta que, en esa época, era riquísimo en vegetación y otros recursos que les permitieron un crecimiento de tales proporciones.
Eran los titanes y dominaban. Con el tiempo la Tierra en su evolución física sufrió varios ajustes, hasta que se produjo uno muy singular que acabó con la vida de estas inmensas criaturas. El hecho traumático fue un deslizamiento de los polos magnéticos que provocó un enfriamiento súbito del planeta; y los dinosaurios que necesitaban de una cantidad elevada de calor fueron extintos.
La Tierra después de éste gran cataclismo y cambio climático, pasó mucho tiempo cubierta de hielo. No obstante conservó semillas de vegetación y de vida, y al fundirse el hielo nuevas formas empezaron a aparecer. Cuando terminó el largo periodo del hielo, la Tierra también había adquirido cambios físicos; y a consecuencia de estos cambios polares la parte del extremo norte y extremo sur ahora se encontraban como aplastadas y eso permitió que muchas tierras aflorasen a la superficie y la vida comenzase de nuevo.
En este momento de la evolución terrestre es cuando aparecen unos primates que desarrollaran una inteligencia superior a las demás criaturas; una inteligencia que gracias a una gradual y continua evolución originó al hombre de la Tierra. Los hombres más antiguos aparecieron en el planeta hace 2 millones de años; y en esa época eran caracterizados principalmente por el instinto y deseo de procrear. Los primeros homínidos manifestaron toda su inteligencia, cuando, a diferencia de los demás animales, estos se dieron cuenta que a ellos y solo a ellos se le había dotado de un plus para poder ser los próximos dominadores del planeta.
El origen de esta humanidad no es muy diferente a las demás que pueblan otros planetas; la única diferencia es el ambiente físico que acoge las formas de vida y que puede originar un aspecto diferente. Las humanidades que como la vuestra se han desarrollado gracias a la presencia de un sol cercano, son parecidas a la vuestra en su aspecto exterior. En las partes del Cosmos donde no se han formados los sistema solares, la luz está en continua expansión recorriendo el espacio para seguir creando.
La Creación sigue este proceso:
Primero existe la intención de la Inteligencia infinita de crear, resultante de un acto de amor que se expande y produce la Luz.
La Luz necesita el espacio que se forma al contenerla; y en éste espacio de Luz se crea el Universo
que se manifiesta cuando la Luz recorriendo el espacio infinito lo modifica originando nuevos espacios de luz que se alejan hasta densificarse en la materia.
La Luz no debe ser entendida con el concepto de luz que tenéis.
La Luz creadora es la manifestación de la Inteligencia infinita, es la mente.
La Luz atraviesa el espacio y se expande hasta el infinito en su acto de creación.
Ella no se acaba, mientras que el espacio que la contiene es limitado, pero ella va recreando espacios hasta el infinito para seguir expandiéndose y manifestar la intención de la Inteligencia infinita.
Terminamos esta comunicación añadiendo que: -El ser humano ha evolucionado como tal, no solamente porque ha desarrollado una inteligencia que lo ha diferenciado de los demás animales, si no, porque esta inteligencia (reflejo de la infinita), le ha permitido albergar en sí el espíritu reflejo del Amor del Padre, que será la vía para volver a la fuente.
Nos despedimos con un fuerte abrazo de mucha luz y amor.
Hasta pronto.
Vuestros hermanos delfines.