Orense, 29-8-2013 Mensaje del Padre
Recibido por Mª de los ángeles Vázquez Pérez
Mis amadísimos hijitos que buscáis el conocimiento y estáis interesados en saber más de la vida espiritual. Yo os aliento a que sigáis buscando dentro de vuestro propio interior; ahí está todo el conocimiento que tanto buscáis y desesperados estáis por no encontrar la respuesta a tantas cosas que os suceden. Interiorizad en vosotros y tendréis la solución que tanto os apremia. Vuestro ser reconoce vuestra inquietud y desea daros todas las respuestas necesarias para liberaros de todo el dolor acumulado. No necesariamente es bueno que sufráis tanto. Vuestro Yo Superior está decidido a daros todas las respuestas necesarias para que el espíritu crezca y se haga más fuerte.
Ante cualquier eventualidad, es necesario verse dentro y saber que todo está de la mano de Dios; y como Él habita en vuestro interior, nada está mal. Solo mirándose y amándose interiormente comprenderéis que el ser humano se ama poco así mismo y emplea muchos, muchísimos minutos para el resto del mundo, sin pensar que lo más importante está abandonado.
Tienes que amarte con un fin. Cuando te amas tú, estás amando a Dios y al resto del mundo. Entiéndelo. Si tratas de amar a otros y tú no pones todo tú interés para hacerte digno de Su amor, no te estás amando a ti. Dios te ama por encima de todo y Él está en ti. No puedes negarte un poco de ese deleite que Él te brinda a ti. Ámate y lo estarás amando a Él sin ninguna dificultad.
Solo cuando hablas y te expresas de esa manera tan natural, como si lo vieses y os estrecharais entre amor y amor, pasas por la premura de sentir que Dios está contigo haciéndote mil halagos de todas las cosas bellas que tienes y que te son tan necesarias para tu crecimiento.
Hola hija mía, o hijo, ¿Cómo crees que Soy Yo?, me pregunto tantas y tantas veces. No ves que solo quiero amarte. A un desconocido le puedes brindar la oportunidad de que llegue a ser tu mejor amigo, ¿y por qué no Yo, si siempre soñé con tu generosa alma y tu bien estar? Anímate y date un respiro de aliento Divino, y verás cómo podrás establecer un contacto harmónico y tan sincero como como es de esperar. Yo no te juzgo, porque tienes que aprender a diferenciar lo bello de lo tosco; y hay tanta belleza dentro de tu alma… Tú lo desconoces, claro está, pero Yo Sé lo que se esconde dentro de cada ser.
Benditos todos que estáis aprendiendo a generar unas bellas energías que se suman a ese pilar de crecimiento. Es un instante para Mí y no tengo prisa alguna; solo me mueve la pasión de padre amoroso y necesito teneros a Mí lado a todos. ¡Claro que no me veis, pero eso no significa que no esté a vuestro lado!
Siempre que deseéis contar conmigo, habladme de vuestras cosas que para Mí son tan importantes; y os lo digo con pasión de padre amoroso. ¿Pensáis que Yo os lo negaría? No, mis luceros a los que podría dar todo, pero tengo que velar por vuestro crecimiento espiritual y daros la seguridad. A pesar de que penséis que no estoy, ¡Claro que estoy! Ji, ji, ji. Me sabe bien el veros que tengáis éxito por vuestros propios medios. Yo no os podría estar dando valores si no los merecieseis.
Hay seres que trabajan a destajo y otros están en un sofá dormidos. Sin sacrificio no hay nada; eso también hace que Yo valore sus decisiones a la hora de tomar en cuenta el valor de aquel que trabaja y se esfuerza. Pero hijito Mío, si no es éste el tiempo de tú apertura de mente, será en otro momento, no hay prisa para ninguno. Solo que Yo estaría mejor viéndote feliz y sin privaciones, ¿Es justo o no? Un padre solo desea lo mejor para sus hijos y los bendice diariamente para que todo le salga a la perfección; pero el padre no asiste a su trabajo para que su hijo holgazanee y mire para otro lado. ¡Cuánto puede sufrir un padre cuando sus hijos salen torcidos!, pero espera a que se enderecen. Yo hago exactamente igual: los miro y observo con paciencia y no pierdo el aplomo nunca, no puedo. Soy un padre con aplomo y doy seguridad a todos.
¡Ay luceros Míos! Qué tiernas palabras puede decir un padre y una madre que velan por la seguridad de ellos… eso sí que no lo entendéis. Os cuesta tanto abriros al amor… Con tanto egoísmo, ¿Cómo pensáis, sinceramente, encontrar el camino de regreso a vuestra casa sagrada? Porque hay una casa verdadera que está llena de valores para que os adentréis en ella y sepáis qué sois y cómo habéis vencido los miedos y los tropiezos en esa casa que está ahí. Casa a la par de esa que está de prestado y no tiene apenas importancia; y sin embargo modeláis como si fuese la única.
No es así. Vosotros construisteis un lugar perfecto en otra dimensión que está llena de valores y sellada con fuerte, fuertísimo entusiasmo que vosotros desconocéis en esta dimensión en la que os encontráis. Estando abiertos a todos los valores que Yo os ofrezco, las puertas de esa residencia se abren para dar paso a toda la sabiduría existente. ¡Cómo iba Yo negar algo tan hermoso a toda Mi familia cósmica…!
No puedo; y cuando veo a los que ya gozan de éste lugar soy feliz y los miro con pasión de padre; pero también veo cuantos faltan aún por llegar para que encuentren todo en su sitio. Primero los bendigo, y luego los oriento para que el tiempo que tengan que estar en familia se amen y traten de generar un encuentro casual con otros que llegaron antes. Así los trato a todos por un igual, no hay celos ni malas ideas; solo amor y pasión por el reencuentro, pasando unas agradables vacaciones y conociéndose mejor. Esto sí. Lo dispongo para que estas casas de reconciliación que tengan sean lo mejor que hayan tenido en miles de años que han vivido en el plano físico.
Esto es la lección más hermosa que han tenido en tiempo de espera. ¡Cómo no voy Yo a protegerlos…! Sea como sea Yo estoy aquí dando el “coñazo” y haciendo Mí buena labor como padre. ¿Soy o no Soy un buen padre? Creo que sí. Tengo mis fallos, para vosotros, pero, ¿Qué padre no los tiene, verdad?
Que la luz y el amor os guíen siempre. Yo Soy el que más os ama y espera poderos ayudar sin inmiscuirme en vuestros asuntillos. Tenéis libre albedrío y os respeto siempre, a pesar de que espere mirando por el rabillo de mis ojos cómo subís esa gran escalinata y esté pendiente de todos los que llegan para gozar esta hermosura.
Aquí no hay riquezas, como las vuestras, hay otras mejores que no provocan la avaricia, sino que todos desean compartirla y darse al servicio de los demás.
Quiero que me entendáis y Sé que lo haréis cada vez que miréis éste bloc. Todo está dicho en él. ¡Cuánto deseo de conocimiento deseo para todos…! Ya lo veis, solo hago hablaros de amor y del renacer a otra dimensión. No hay que morir para conocer esto; solo entregarse a las Energías Divinas y ellas os darán todo el bello placer de estar en paz y vivir en Mí siempre.
Que la paz, el amor y la dicha sean continuadas para estos momentos de apertura en la Tierra. Un saludo Mío para todos los que siguen Mis lecciones. Hasta hora.
Con amor siempre, Yo el que más os amo.
Que gocéis de la libertad que Yo siempre os doy.