Orense, 30-10-2012 Mensaje de un Guía
Canalizado por Mª de los ángeles V.P:
Mis luceritos amados. Hoy tengo el gran placer de ayudaros en ésta comunicación. Son días sentidos por vuestros hermanos ya fuera de su cuerpo físico, y ellos también tienen que conectar con vosotros y daros las gracias por todo éste conocimiento que les transmitís.
Son días de soledad para aquellos que no han llegado a su entendimiento y necesitan vuestras oraciones para que los reconforten en su tristeza. Pero os diré que son pocos, poquísimos los seres que no están entendiendo éste programa de vida. Y hoy quiero a través de ellos mandaros el Amor que ellos me proyectan para alentaros y daros la fuerza y el estímulo.
Cuando después de la pérdida os sentís perdidos, no sabéis que dirección tomar, pero esto es un ejemplo. Todos somos seres en evolución y estamos partiendo continuamente y es mucho el cariño que reciben con vuestras oraciones sentidas. Vuestros trabajos, que aquí desde el plano físico se les envían, es para que su alma despierte y se sienta aliviada por éste amor que generáis a través de la oración.
Hoy quisiera deciros que en medio de vuestras plegarias se oyen palabras como: perdón, perdón, muchas veces. Otras veces: -gracias, gracias, simplemente.
Esto es muy generoso por vuestra parte; y también por la suya que reconocen el servicio de todos aquellos que rezan por su alma para que vean pronto la luz hermosa y generosa que los hará cambiar de manera de pensar y actuar.
Esto es simplemente un saludo de gratitud a todos aquellos que fueron ayudados sin pena, dejándolos partir con la consideración necesaria. No tenían más tiempo. Su familia lo sintió de manera inmediata pero, hay que pensar que partieron para una vida mejor y más saludable para su alma. Ellos, viendo la necesidad de su progreso se alejaron rápido de ésta vida de pena y sufrimiento.
Solo tengo que deciros que todos tenéis un ángel guardián que os protege y vela por vosotros; y os da las alas necesarias para que no os quedéis atrapados en el campo físico, como en el caso de aquellos que están llorando su pérdida. No se han perdido, solo se han ido a un lugar más bonito y sin penas.
¿Cómo podéis ser tan egoístas y no dejarlos que se vallan a vivir una aventura llena de amor y sabiduría? Tenéis que ser más fraternales. Cuando viaja un alma a unos lugares para ella desconocidos no sabe a quien se puede encontrar, y esos seres de luz celestiales están vigilantes para que su progreso de vida no se pierda. Están apoyándolos para enseñarles el camino a su nueva casa. Luego, más tarde ven que se encuentran entre amigos y bienhechores.
Todo responde a las Leyes del Amor o Leyes Divinas; y solo hay que pensar que Dios todo amor no permite que esos seres se mezclen con aquellos que por su torpeza están pasándolo mal. Es su ignorancia y su manera de ver la vida. Solo por el amor será salvo el hombre, -dijo Jesús de Nazaret-, y también tuvo sus razones para decir: -el que no sabe amar desde el corazón, tendrá que aprender a desnudar su alma para sentirse un ser privilegiado y poder ayudar a su familia. Y en éstas estamos todos.
Deberéis sentir un amor distinto cuando parte un ser, para darle la esperanza de que será recogido y llevado a otros lugares donde lo atenderán y le darán las lecciones pertinentes para su evolución. Hay seres tan luminosos... y sin embargo, su familia los rechaza por su manera de actuar. Son seres generosos con otros seres que no conocen, y sin embargo ellos trabajan con gran afán para sentirse mejor con ellos mismos.
Esto es un mero testimonio de que tienen mucho camino avanzado, aunque no conozcan el camino espiritual, según se mire. Sin embargo, su trayectoria es otra muy distinta a lo habitual. Son seres que han venido a entregar lo mejor de sí mismos sin apenas conocimiento; y sin embargo, lo han hecho fenomenal. Por eso, cada ser o alma es distinta y hay que proyectar amor siempre, porque así se ayuda a que su puesta en escena sea algo tan fantástico como el ser necesita.
Los seres que se van y se pide por ellos, estos despiertan antes y antes se dan cuenta de donde están y de su alegría y apoyos. Esto está muy bien reflejado en los seres que nadie echa de menos. No los hacen volver a tras para que se despidan y estén llorando continuamente por su pérdida. Nacieron para irse un día, y así es.
No podéis distorsionar a una almita que partió haciéndole sentir más tarde responsable del dolor de aquel que se queda abatido. Solo es cuestión de entendimiento. No lloréis por los muertos, porque no se han muerto. Siguen vivos, solo que en otro lugar más hermoso para ellos. Tienen que ser felices y ver lo que supuestamente proyectarán a sus hermanos que se quedan, sean esposas o hijos; incluso aquellos que parten dejando sus hijos chiquitos, los echarán de menos, pero las almas que los reciben son tan amorosas que les darán todo cuanto necesiten para ésta ausencia pasajera.
Todos tenemos que partir, y nadie es de nadie. Eso entendedlo. Podéis amar sin interés propio y dar todo el apoyo que los seres necesiten, pero no aprisionarlos con vuestro dolor. Eso es egoísmo. Los queréis para que sufran a vuestro lado sin importaros el dolor de su partida. Ellos os echan de menos también, pero sienten que ese amor tan grande de la Divina Presencia los purifica y los calma para que se vallan sin sufrimiento.
Pero hay otros casos donde a pesar de los años están con lamentos continuados que les hacen ver la poca evolución de sus seres amados, y entonces son ellos los que piden continuadamente por sus familias para que sean sanadas de su propio egoísmo.
Todos estamos en éste barco de generosidad, y sin embargo, hay seres que frecuentemente dan muestras de alivio y se sienten presos de ese amor tan generoso que les proyectan para que comiencen a ser más respetuosos con los que parten y se olvidan de sus actos hechos que han acontecido en el plano físico.
No sabían más, se equivocaron, pero hoy están en una nube de grandiosidad pidiendo por sus familias que están en la Tierra. Tienen sus diferencias y manera de pensar y hay que dejarlos que crezcan. A pesar de sus dudas, es una manera de crecer en éste plano físico.
Hoy todos os dicen que son felices y el amor incondicional está aquí, porque ellos con vuestros rezos se hacen eco de tus promesas y deseos. Están siempre sirviendo a todos con su amor y su virtud. No dejan pasar el tiempo para hacerse merecedores de aquello que más les conviene. Quieren ser ángeles para vosotros y como tal actúan ante ésta situación.
Los seres que proyectan amor están siempre llenando la mente de sus seres queridos dándoles ánimo y esperanza para que se dejen de divagaciones y sepan que les aman. Ellos también se equivocaron sin saberlo, pero intentaron hacerlo lo mejor posible en sus experiencias como humanos. Vosotros también os equivocaréis y seréis juzgados por vuestros antecesores. Todos tienen un mérito especial en estos días de fieles difuntos. Tened presente que su bondad llegará del cielo con todo su cariño y sentido amor.
Que Dios os proteja y podáis entender esta misiva de la luz para todos los que perdieron seres amados y los siguen amando sin interferir en sus vidas. Que Dios os colme de bendiciones y dicha abundante.
Aleluya, aleluya siempre.
Amor para todos los que seguiréis éste texto.
