CUANDO ANALICEMOS PRIMERO Y SEAMOS HONESTOS CON NOSOTROS MISMOS....

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Orense, 25-1-2016 Mensaje del Arcángel Ezequiel

 Psico grafiado por Gumersindo M.A:

La compasión: No es solamente tener compasión hacia los demás, sino también empezar a tenerla por uno mismo. Cuando queremos desarrollar la compasión, debemos primero auto examinarnos en nuestro interior, y limpiar y sanar todo lo que aun subyace oculto en nuestro cuerpo mental y emocional.

 Es desde ahí desde donde comenzaremos a observar esos tapices que nos están ocultando algo tan sutil que no nos deja ver las cosas tal y como son. Por eso solemos juzgar de una manera precipitada sin pasarlo por ese tamiz que poseemos dentro de nuestro corazón.
  Cuando analicemos primero, y seamos honestos con nosotros mismos, descubriremos cuan ciegos estábamos y lo irresponsablemente que procedimos al querer etiquetar cada acción o palabra venida de un hermano nuestro. No somos quien para valorar y juzgar expresamente todo lo que ocurre a nuestro alrededor. La sabiduría se reconoce en el ser que sabe escuchar sin emitir juicio alguno. Solo podemos acompañar a ese hermano en un acto pasivo de escucha, y estar dispuestos a comprender el sufrimiento del que es portador, sintiéndose afligido y desorientado.

  La mejor manera de ayudar es escuchándolo y permitiendo que saque de su interior toda esa amargura que lo afligía.  Más tarde su propio Yo Superior suavizará su parte espiritual atormentada y limpiará esa tragedia a cumulada en su cuerpo emocional.

 Solamente acompañad, no os involucréis. Dadle tiempo a ese hermano. Más adelante os pedirá vuestro consejo y es ahí donde podréis acompañarlo para que su estado de ánimo suba.

  Cuando una persona os abre el corazón no debéis reprimirla, pues con ello no estáis permitiendo que se abran esos pétalos en su interior y no tendrá la oportunidad de que aflore ese tormento que lo aflige, lo desanima y le impide seguir reforzando su fe.
  Sed condescendientes y saber que a ese hermano puede que lo encontréis más adelante en vuestro camino y necesitéis de él. La vida es una cadena de acontecimientos que van apareciendo ante vosotros para ser comprendidos y superados.

 Éste es el momento que os tocó vivir para crecer y limpiar todo lo negativo que aun subyace escondido en lo más profundo de vuestro ser. Más adelante seréis vosotros quienes ayuden a otros hermanos de camino con vuestra sabiduría y prudencia.
  Debéis tener buenos modales y saber valorar hasta lo más insignificante, pues ahí también se esconden grandes lecciones. Solamente tenéis que estar despiertos para apreciarlas; sino, éstas pasarán inadvertidas y no las apreciaréis.

 Sois un gran ejército de almas que estáis despertando en este momento, cuando la Luz entra imparable en vuestro ser, haciendo que éste despierte del letargo al que fue sometido durante tanto tiempo. Ahora os toca a vosotros portar esa antorcha y caminar al frente, mostrando el camino a seguir, a través de vuestra sabiduría y comprensión hacia esos hermanos que están tardando tanto en desplegar sus antenas para recoger esos filamentos luminosos que están llegando para convertiros en verdaderos Seres de Luz.
  Creo que ya está bien y hemos aclarado un poco más el papel que debéis jugar en estos momentos; sino no estaríais viviendo esta etapa tan conflictiva como esperanzadora para vuestro progreso espiritual.

 Me despido por hoy, agradeciendo tu disponibilidad para escribir lo que nosotros intentamos transmitiros. Luz y Amor para todo el colectivo de trabajadores de la Luz.

 Desde la Pléyades y Alción, un saludo amoroso del Arcángel Ezequiel. El Amor está depositado en tú corazón fantástico. Escúchanos a través de sus latidos. Deseosos estamos de poder comunicar a través del centro de tú ser. Agradecidos siempre, seres de Luz te apoyamos y dirigimos tu bondad, tu fe y espiritualidad. Estamos conectados con ese fluido esperanzador que todos los seres debieran canalizar, y esperanza tenemos que así será.
  Escucha mi voz. A través del silencio estaré contigo. Tuyo soy siempre. Con Amor me despido. Arcángel Ezequiel, esperanza de este planeta en resurgimiento. Aquí estamos para traeros la Paz, el Equilibrio, la Bondad y el Éxito.

  Hasta siempre. Hasta la próxima misiva que será pronto, pronto. Cuando tú lo desees.             

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